Me gustan las Converse sucias.

30.8.11 - Creado por María Milagros Brugman
Sí, me gustan. Me gustan porque se ven sucias. Me gustan las Converse sucias porque son parte de toda una filosofía, de un estilo de vida. Sé que muchos me dirán cochina, pero me encantan las Converse sucias.

Mi primer par fue un regalo de un ex. Cumplíamos 6 meses, íbamos a casa de un amigo, a una fiesta. Llegó con una cajita diciéndo que era por el mesiversario, él tenía unas idénticas, igual de nuevas, blancas y relucientes. Las recibí, vi su diseño, tan limpias y resaltando que el resto de mí no era tan prolijo. Me encantaron, sí, incluso fui feliz porque creo que nunca había tenido zapatillas tan caras. Esa misma noche creo haber vomitado sobre ellas y creé así su primera mancha (que apenas llegué a mi casa lavé, por si acaso)

Me gustan las Converse sucias y mi fijación avanza más: Me gustan los chicos con Converse sucias. Me gusta que tengan este aspecto desaliñado que se complementa perfectamente con unas converse sucias y una actitud alpinchista. Detesto las converse que simulan estar sucias, me gusta que su mugre sea auténtica, al igual que la persona que las usa. Las manchas marrones, raspadas y goteadas muestran una vida agitada, ocupada y sin embargo despreocupada por apariencias. Me gustan las personas así, sin presiones y con ocupaciones.

Me gustan las Converse sucias y disfruto ver como complementan a la persona que las lleva. No todos las pueden usar con orgullo, existen personas que quieren llevarlas sucias, pero sus mamás no los dejan, incluso roban sus zapatillas para lavarlas (experiencia propia, 16 años). Esas personas -siento- que no tienen libertad. Me gustan las Converse sucias, el aspecto perfectamente desaliñado que proyectan.

Me gusta incluso la sensación de llevarlas sucias, que las señoras te miren con desagrado, los vendedores de tiendas pitucas con preocupación y que otras personas, que también les gusten las Converse sucias, te miren con complicidad por la calle. Me gustan las Converse sucias, me gusta esa vida.

Les presento a mis Converse sucias.